Tu centro ecuestre puede organizar clases de equitación para niños. Son los criadores de los caballos alojados en tu centro los que deciden o no dar clases en tu centro. Así ganan cierta cantidad que dependerá de la calidad de tus cursos. Esta cantidad no se te descuenta; tú sólo tienes que pagar los sueldos de los monitores.
El precio de la clase dependerá del prestigio de tu centro, el número de monitores (necesitarás un monitor de equitación por cada 30 caballos), la salud y el nivel de doma de los caballos que alojas. El número de clases que tu centro puede proponer cada día es en principio ilimitado.